lunes, 1 de marzo de 2010

RESUMEN DEL TEXTO DE CLIFFORD GEERTZ.

Clifford Geertz en este capitulo de su libro “Conocimiento Local. Ensayos sobre la interpretación de las culturas”, reflexiona sobre el arte como sistema cultural. Geertz como antropólogo, intenta interpretar los símbolos claves de cada cultura que él define como un sistema de concepciones expresadas en formas simbólicas por medio de las cuales la gente se comunica, perpetua y desarrolla su conocimiento sobre las actitudes hacia la vida.
Es muy difícil hablar o comentar sobre arte, pero todo el mundo que percibe o contenpla una manifestación artística lo hace. Dependiendo de la formación de la persona, su bagaje cultural, su condición social y su contexto, opina de una u otra forma. A veces se lanzan ideas u opiniones que llegan a algo y otras se pierden en un conglomerado de conceptos y teorías de lo que se percibe o siente que terminan mas por “desopinar” y liar que por aclarar lo que se intenta expresar.
Ante esta necesidad de hablar sobre el arte tendemos a describir, analizar, comparar, juzgar y clasificar. Construyendo teorías acerca de la creatividad, la forma, la percepción y la función social, considerando que el arte es un lenguaje, un símbolo, un acto y un modelo de sensaciones.
Geertz apunta que el arte se describe en todas partes por medio de lo podrían llamarse términos profesionales, en términos de progresiones tonales, relaciones cromáticas o formas prosaicas. Pero esto no se limita solo a occidente o la era moderna, como puede parecer, si no, a todas las culturas, lugares y épocas.
Así mismo no es posible separar sociedad y arte a la hora de hablar de él. Las reflexiones sobre e arte sus términos y conceptos derivan de los contenidos culturales y de las experiencias humanas. Por tanto en cada cultura y situación estas reflexiones, con sus términos y conceptos, serán diferentes y distintos. Matisse afirmaba que era incapaz de hacer distinciones entre el sentimiento que tenia de la vida y su manera de expresarlo. Esta es una afirmación particular, pero en general las reflexiones sobre el arte se basan en las experiencias colectivas de una sociedad e inmersas dentro de un contexto a cada cual distinto.
El arte no significa la mismo en la China clásica que en el Islam clásico, dependerá de creencias, sistemas de clasificación, símbolos determinados y mentalidad. La visión de arte desde la perspectiva occidental no surge hasta el siglo XVIII, el autor de una obra de arte en la Roma clásica no era consciente de que estaba realizando arte como hoy lo concebimos, ni el miembro de una tribu de África al tejer una rafia, por ejemplo, tampoco es consciente de que su manifestaron es arte, aunque nosotros lo analicemos como tal.
Geertz se apoya en el autor Robert F. Thomson y su análisis sobre la línea en la escultura de la tribu yoruba. En su análisis hace ver que para el yoruba la línea según su trazado, longitud, profundidad, limpieza, etc. posee un significado, no solo en la escultura, si no , en adornos personales, cerámica o cicatrices y maquillaje en sus caras, y según como eran estas líneas tenían una razón de ser expresando algo.
Para confirmar este carácter semiótico de las experiencias humanas, Geertz cita a Anthony Forge y su estudio sobre la pintura mate en cuatro colores de la tribu abelan de Nueva guinea. Los abelan usaban el ovalo como representación del vientre de la mujer y los colores para describir situaciones anímicas. Vinculados con aspectos de su ritual, intentan mostrar el poder o el liderazgo del hombre sobre la mujer a base de formas y colores, casualmente no dan la importancia que dan los yorubas a las líneas. Se puede decir que el uso de la forma y el contenido en la obra de arte es allí donde se produce, un acto cultural y no una teoría filosófica.
Geertz para concretar más en el asunto analiza la pintura del Quattrocento italiano y la poesía islámica. Para hablar de la pintura italiana cita a Baxandall, autor que trata de definir la preparación a la que podían echar mano ante estímulos visuales complejos el público de esta pintura, o sea, los otros pintores y las clases protectoras que encargaban y compraban las pinturas.
Baxandall analiza en primer lugar el Quattrocento y sus experiencias de vida para poder concebir las cosas a modo quattrocentista. Así, plantea en primer lugar que las pinturas italianas del siglo quince eran religiosas y no solo por los temas, sino también por las intenciones para cuyo fin fueron diseñadas. No se buscaba una mera transcripción de unos hechos para ser observados, sino, una reflexión sobre el hecho en si, intentando conseguir un adoctrinamiento al que la observa. Para esto se usaran técnicas que se deben también analizar en la época. Por ejemplo en el caso de la composición de las figuras, era claro, en las pinturas de Botticeli, “Nacimiento de Venus” y “Primavera”, la influencia de la danza de la época, los personajes se disponían en el cuadro de modo de estar danzando, incluso en sus movimientos y gestos, estas danzas se realizaba muy frecuentemente entre los miembros de la sociedad mas acaudalados, y que así, percibirían con mayor claridad el mensaje al observar la obra. La forma o técnicas de medición de la época influían de igual modo en las pinturas. La sociedad mas acaudalada convivía con el comercio y el mercantilismo. las unidades y modos de medida estaban muy ligadas a los recipientes que contenían las mercancías, así, el pintor y tratadista Piero della Francesca incluso pública en unos de sus tratados las formas y maneras de medir longitudinal y volumetricamente . En las composiciones de los cuadros, el autor, al tener asimilado estos métodos de medidas y esta percepción de distancias y volúmenes lo usa y refleja en sus obras para clarificar su mensaje.
La poesía islámica llego a rivalizar con arquitectura y se convirtió en arte cardinal de esta civilización. Pero al mismo tiempo rozaba los márgenes de la forma mas grave de blasfemia. Esto se comprende por la importancia y el sentido del lenguaje escrito y hablado en el Islam. El coran, eje del Islam, es un libro para recitar y escrito en verso. El poeta rivaliza con el coran y debe de tratar los temas de manera cautelosa para no confundir o llevar a la duda a su receptor. La poesía islámica se escribía pues para ser recitada en público, normalmente en los actos sociales que reunían a más número de gente, como bodas y celebraciones familiares, y sus temas pasaban de lo material a lo espiritual y en gran número de veces se usaban para criticar situaciones o personas en concreto. Era pues un lenguaje directo y los temas estaban influenciados por los temas cotidianos de la sociedad, la mujer y su papel en la sociedad, criticando a los hombres que traten con ellas cuando está prohibido, la avaricia de los comerciantes, las rencillas entre vecinos o entre los propios poetas, etc… La poesía, no exenta de belleza, debe de ser enmarcada en el contexto del cual surge y se desarrolla.
Puntualizando, Geertz escribe que el artista trabaja con las capacidades de su audiencia, o sea, en su comprensión. Ciertas de estas capacidades son innatas pero otras están inmersas en las experiencias de la vida, cosas que debemos de considerar y reflexionar, ante las que tenemos que reaccionar.
Personalmente creo que la visión de Geertz del arte como sistema de conocimiento es así. Yo he entendido que no podemos separar arte de sociedad y que depende mucho el concepto de la realidad social y cultural donde se vive. Occidente ha sido quien ha puesto los argumentos desde el principio sobre arte y desde su punto de vista se han analizado los demás que no pertenecían a occidente. Se debe tener en cuenta ante una manifestación artística el donde, el como y el porque y analizarla despojándose de ideas preconcebidas y asimilando las nuevas.

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